Orlyak ordinario. Descripción, aplicación en la vida humana.

¿Florece el helecho? Definitivamente no, dirían los realistas. ¡Pero qué hermosas son las leyendas sobre sus poderes mágicos! - exclamarán los soñadores. De hecho, la gente siempre ha venerado al helecho como una planta misteriosa y poderosa. Ha estado creciendo en el planeta durante millones de años, trayendo beneficios y daños a las personas. Después de todo, los helechos a menudo se convierten en malas hierbas. Como, por ejemplo, una de las especies de esta planta es el helecho común. Se distribuye casi por todo el mundo, prefiere un bosque, pero con luz, claros, matorrales de arbustos, así como campos y pastos abandonados.

Puede distinguir esta especie por el borde doblado de la hoja. Además, los helechos nunca crecen como arbustos, sino solo uno por uno, a cierta distancia entre sí (aunque debajo del suelo, las plantas cercanas están conectadas por rizomas ramificados). La altura de esta planta puede alcanzar el metro y medio, aunque no llega a este tamaño con tanta frecuencia, esto requiere condiciones favorables.

Desde la antigüedad, la gente ha utilizado helechos en la vida cotidiana. El rizoma, que contiene mucho almidón, se convierte en una fuente de pegamento especial, que se puede impregnar con tejidos para obtener un efecto impermeable. Anteriormente, también servía como jabón. En algunas regiones de Europa occidental, era costumbre rellenar almohadas con hojas de helecho. Se creía que tal cama protege contra la ciática y repele los insectos.

En algunos países, por ejemplo, en Japón, los helechos se consumen activamente como alimento. Las placas de hojas jóvenes, aún no desplegadas, de esta planta se cosechan activamente, se salan y se conservan en escabeche en Siberia. Este manjar se equipara con aceitunas o buenas setas. Pero solo hay que prepararlo remojándolo bien en agua para que no se envenene, porque el helecho es una planta venenosa.

La medicina tradicional también prestó atención a este helecho. Se utiliza interna y externamente para diversas enfermedades (eccema, raquitismo y otras), como agente antiséptico, antihelmíntico.