Cultivando hierba de jabón y cuidándola

El cultivo de la hierba de jabón no llevará mucho tiempo si crea las condiciones más óptimas y favorables para ello. Para empezar, el suelo debe estar suelto, seco y nutritivo. Por cierto, la flor crece bien entre las grietas de las piedras en un lugar soleado y ligeramente sombreado.

A la planta no le gusta el exceso de nitrógeno. Debido al hecho de que la hierba de jabón con hojas de albahaca se distingue por un sistema de raíces ramificado, debe plantarse junto con un trozo de tierra.

La hierba de jabón, que no puede considerarse difícil de cultivar, debe podarse después de la floración. Esto le dará al arbusto una hermosa forma compacta.

Medicinal jabonoso

Esta planta es famosa no solo por su atractivo visual, sino también por sus propiedades curativas, que permiten utilizar la flor en la medicina popular.

Jabonoso, cuya foto le permite imaginar la apariencia de una flor, contiene saponinas, ácido ascórbico y un glucósido. Estas sustancias proporcionan la planta para el tratamiento de la tos y la bronquitis. Además, la hierba de jabón medicinal tiene un efecto laxante y diurético.

Se agrega a diversas decocciones e infusiones para limpiar la sangre. También ayuda a hacer frente a enfermedades de la piel como sarna, eccema, dermatitis, furunculosis y erupciones cutáneas. Es cierto que no se puede hacer solo con agua jabonosa y baños. Para cualquier enfermedad, es necesaria la consulta de un especialista calificado.

Y la medicina tradicional, incluida una decocción de hierba de jabón, puede ser una excelente profilaxis o un complemento de la terapia farmacológica principal recetada por un médico.