Clavel. Cuidado

Los claveles se dividen en dos grupos condicionales: de un color y de dos colores. No es una planta muy exigente, por lo que cuidarla no es difícil. Además, es una planta perenne bastante resistente al frío que no es necesario desenterrar todos los años en el otoño y volver a plantar en la primavera.

Hay 300 tipos de claveles, pero, desafortunadamente, solo algunos de ellos son adecuados para cultivar en casa. Estos claveles son muy similares, pero todavía hay algunos matices a tener en cuenta a la hora de cultivarlos.

Por ejemplo, el clavel granadino es muy amante de la luz, pero no es quisquilloso con los cambios de temperatura. Tolera bien el frío y la sequía. Es mejor plantarlo en suelo drenado, fertilizado varios años antes de plantar, fértil. No tolera la alta humedad, ya que padece enfermedades fúngicas en aguas estancadas.

Clavel turco, cuidarlo es algo diferente. Es menos exigente para mucha iluminación, incluso puede sentirse bien en sombra parcial. También es resistente a las heladas, pero no a la sequía. La planta necesita riego periódico, pero tampoco puede soportar la humedad del suelo y el clima. Ella es una planta bienal. Es decir, al tercer día de floración pierde sus cualidades decorativas.

La plantación con todo tipo de claveles se tolera normalmente, se podría decir, fácilmente. Se pueden cultivar en apartamentos, en el balcón, propagándose por semillas, haciendo capas o esquejes.

En primavera conviene tapar la planta desde los primeros rayos del sol hasta que el clavel empiece a crecer. Fertiliza y suelta la tierra. Es recomendable alimentar 3-4 veces a lo largo de la temporada.

Durante el riego, no permita que el agua penetre en los capullos y las flores, ya que esto puede arruinar la flor.

Categoría:Flores | Clavel
Avatar de Loveina

Amo mucho los claveles, es una lástima que estas flores se hicieran flores de dolor, principalmente en los funerales y el 9 de mayo se pueden encontrar en abundancia, pero me son agradables en cualquier otra festividad.